Entre mis 20
y mis 25 perdí lo que de mi pensaba
Destruida mi
autoestima
ya no me sentía
una Miss Universo de Catan
si no una
simple novia de este chico de acá.
Es amor me
digo.
Sé que a él
no le enseñaron a amar.
El no
necesita decirme palabras bonitas
y yo no
necesito de esas palabras para vivir.
Mentira,
mentira, mentira
hoy me culpo
y hago un bollo con mis sentimientos
porque
mientras que el otro de antes no me registraba
por lo menos
yo sabía que no me registraba
ahora no
entiendo, me sobran dudas.
Con latidos
esperanzados
que se
desacompasan
con penas
enormes
que escondo
en mi almohada
construyo
una casa
que comienzo
a desarmar en mis sueños
porque en la
vida
él no me da
palabras para mi ego.
De forma típicamente
inexacta
me encontré
a mí misma en esta maraña
con latidos
tristes y poco constantes
la arritmia comenzó
cuando menos lo pensaba.
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